Yo soy el elefante Tatarí
de la selva salvaje tropical,
me gusta estar alegre y ser feliz
y soy un gran amigo de Tarzán.
Yo me llevo bien con todo animal,
lo mismo la gacela que el león,
me asusto solamente del ratón
y es que a ése no lo puedo soportar.
Y si alguno pregunta por mí,
ya verán que les dicen así:—¡Tatarí!, Tatarí!,
grande y fuerte corazón.
¡Tatarí!, ¡Tatarí!,
compañero es el mejor.
Un día la leona me pidió
que buscara a su hijito chiquitín:
—Tú quédate tranquila, aquí estoy yo,
verás que pronto lo tienes aquí.
Con mis fuertes pulmones le llamé,
a mis orejas le llegó su voz,
con mi trompa del hoyo le saqué
y al poco su mamita le abrazó.
¡Tatarí!, Tatarí!,
grande y fuerte corazón.
¡Tatarí!, ¡Tatarí!,
compañero es el mejor.